Del asunto metalepsis me quedó no un conocimiento sólido, sino más bien una intuición. Así que lo digo como puedo.
La metalepsis es una figura retórica que funciona parecido a la metonimia, por desplazamiento de sentido, pero no de una palabra sino de toda la oración. El ejemplo que más encontré en internet es: la oración acuérdate de lo que me ofreciste, en realidad quiere decir cúmplelo. 👈No le den bola a esto porque no nos importa.
Pero la metalepsis que nos interesa es la que en literatura –según dicen los cuervos de la RAE– supone la interferencia entre distintos niveles narrativos, como cuando el narrador irrumpe en el ámbito de los personajes o viceversa.
Tendríamos que pensar a los relatos como cuadros que contienen una lógica del mundo y cuando se introduce una metalepsis sucede algo como franquear el marco, pasar por un portal a otra dimensión, algo que pone patas arriba las cosas y te deja pensando. Es como un pasadizo a lo fantástico.
Hablando de cuadros me robé este sinóptico, para que les quede todavía más confuso todo:
Se usan las metalepsis desde hace bocha de tiempo, por ejemplo en una novela inglesa del siglo XVIII, el Tristram Shandy, un lector se mete en la ficción y lo manda a dormir al personaje. Kkkkkkkkkk
En Continuidad de los parques de Cortázar (cuento que ((INCREÍBLE)) nadie del curso logró leer porque no se encuentra por ningún lado, ni en bibliotecas, ni en librerías, ni en internet, ni en casa alguna) ocurre también metalepsis. Hay un personaje que está leyendo una novela en donde hay un asesino que va a matar a alguien que está leyendo, y justamente es el mismo lector que está leyendo su propia historia. 👈Les pude spoilear esto gracias a que le pregunté a Víctor, el bibliotecario, que se leyó todo de Cortázar.
Se cruzan los niveles de la diégesis (lector ficcional) y la metadiégesis (personaje de la ficción que lee el lector ficcional, que es él mismo). Uff, me dio un mareo.
Hay un tipo particular de metalepsis que son los relatos especulares o puesta en abismo 👀.
- Reduplicación simple: sería la historia dentro de la historia (para el que lo leyó, Hamlet).
- Reduplicación hasta el infinito: se trata de una reduplicación mutua como la que se logra al colocar dos espejos enfrentados (la lata de bizcochos de Borges).
- Reduplicación aporética o paradójica: cinta de Moebius.